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viernes, 26 de junio de 2015

El día a día de la Seguridad Privada...

Con este tipo de gentuza tienen que lidiar los vigilantes casi todos los días, pero los medios de comunicación prefieren publicar la otra parte que vende más, cuando los vigilantes deciden poner a los delincuentes a disposición de las fuerzas y cuerpos de seguridad, junto con las pruebas que se dispongan en ese momento.
Si no hubiera un vigilante allí, este gorila cabreado con quien la hubiese tomado..??  
Gracias..!! por hacer nuestro día a día más seguro, que el metro sea más seguro, puertos, aeropuertos, etc... 
 
 

lunes, 22 de junio de 2015

El síndrome del trabajador quemado


El desgaste profesional puede deberse a una mala organización de las tareas por parte de la empresa o a la propia autoexigencia.
 
Calentar la silla no es productivo.
 
Sobrecarga de trabajo, expectativas demasiado altas o falta de directrices claras por parte de los responsables de una empresa. Hay múltiples factores que pueden conducir a un empleado a sufrir burnout, en español síndrome del trabajador quemado. “Todavía se está estudiando la definición más exacta, pero se refiere a un estado de agotamiento y un sentimiento de falta de eficiencia que derivan en negligencia con los objetivos a cumplir por parte del trabajador”, señala Jesús Montero-Marín, psicólogo clínico e investigador en el Instituto Aragonés de Ciencias de la Salud.
 
El término no es nuevo. El psiquiatra estadounidense Herbert Freudenberger lo acuñó en 1974 en el libro Burnout: The High Cost of High Achievement y lo definía como la falta de motivación o incentivos, especialmente cuando no se alcanzan los resultados deseados. Freudenberger publicó este estudio después de trabajar como voluntario en una clínica de desintoxicación neoyorkina y observar que la mayoría de sus compañeros sufría una progresiva pérdida de energía al año de empezar a trabajar, acompañada de síntomas de ansiedad y depresión. Todo ello por la falta de recompensa o satisfacción con ese tipo de empleo.
 
“El síndrome se origina por el padecimiento de estrés laboral crónico y la principal diferencia con una depresión es que mientras ésta conlleva agotamiento y falta de ilusión por la vida en general, el burnout se restringe al ámbito del trabajo. Si no se trata a tiempo, puede acabar afectando a todos los niveles”, señala Antonio Cano, catedrático de Psicología de la Universidad Complutense de Madrid y presidente de la Sociedad Española para el Estudio de la Ansiedad y la Depresión.
¿Cómo puede una persona saber si lo padece? Si se levanta habitualmente cansado y sin ganas de ir a trabajar pese a haber descansado más de siete horas, siente que está dejando de lado su vida personal para atender sus tareas laborales y lo que inicialmente le proporcionaba desafíos y gratificaciones le resulta indiferente, ahí puede saltar la alarma.
 
Otro indicador es que la calidad de las interacciones con las personas a las que atiende sea cada vez peor, o que tenga el sentimiento permanente de ser ineficiente. “A nivel psicosomático se puede manifestar con insomnio, problemas en la piel, dolor de cabeza… A cada uno se le puede manifiestar de una forma distinta, según su tolerancia al estrés y sus características personales”, indica el psicólogo Jesús Montero-Marín, miembro de un grupo de investigación sobre burnout integrado por la Universidad de Zaragoza y el Instituto Aragonés de Ciencias de la Salud.
 
Montero sostiene que el papel de las empresas para prevenir este síndrome es esencial, ya que muchas veces se debe a la falta de organización de la propia compañía. “Estilos de mando excesivamente rígidos que no permiten al trabajador tomar decisiones, horarios poco flexibles o formas inconsistentes de premiar o castigar el esfuerzo son algunas de las dinámicas que deben analizarse y modificarse”, asegura el psicólogo. Una de sus recomendaciones es que las empresas integren en sus programas formativos talleres que enseñen a sus empleados herramientas para hacer frente al estrés.
 
El procedimiento a seguir es que un grupo de expertos evalúe el nivel de agotamiento de la plantilla, diagnostique el estado de los trabajadores y ofrezca un tipo determinado de intervención, normalmente basado en técnicas de relajación como el Mindfulness -práctica de origen budista que sirve para tratar problemas a asociados al estrés y al dolor crónico-.
Su última experiencia fue con el grupo Inditex, donde comprobaron que tras dedicar los últimos diez minutos de la jornada laboral a realizar ejercicios de estiramientos, los indicadores de agotamiento de los empleados se redujeron de forma notable. “El capital humano es un valor muy importante de las compañías. A una persona formada que desempeña bien su trabajo, hay que cuidarla”, remarca Montero.
 
Aunque las personas que sufren este síndrome requieren la intervención de un terapeuta para restaurar sus pensamientos, emociones y conductas, este especialista recomienda seguir estas pautas:
  • Reducir los niveles de activación. “Se trata de hacer higiene a nivel de carga de trabajo”, señala Montero. Si en la oficina es complicado disminuir las tareas, hay que buscar un momento del día para dedicarse al ocio, tanto a practicar deporte como a hacer vida social para no tener la sensación de soledad y aislamiento. Este punto también implica cambiar los esquemas mentales. “Hay mucha gente que cree que si no hace las cosas perfectas no están bien hechas. Hay que enseñarles que los resultados no dependen únicamente de ellos. Otros piensan que no se valora su esfuerzo y que hagan lo que hagan cobrarán lo mismo a final de mes. Esa es una respuesta de adaptación al estrés que provoca que de manera inconsciente vayan reduciendo su nivel de implicación”, explica.
  • Llenar de significado el trabajo. Consiste en identificar nuevas metas y desafíos. El modo de conseguirlo es abandonar la conducta de hacer las tareas de forma rutinaria y hacerlas de manera consciente. “A través de técnicas como el Mindfulness se desarrolla la atención plena que permite ser consciente de lo que se hace en cada momento y centrarse solo en eso”.
  • Disfrutar con el mero hecho de hacer bien las cosas. Esperar únicamente gratificaciones económicas al final de mes es un error. “Aprender a sentirse satisfecho con un trabajo bien hecho es crucial, entender que las recompensas nunca van a ser al 100% porque no existe la perfección”, detalla Montero.
En España no existen datos del nivel de burnout entre los trabajadores. El grupo de investigadores de la Universidad de Zaragoza y el Instituto Aragonés de Ciencias de la Salud publicó en 2011 un estudio que señala que el 30% de los profesores de primaria de las escuelas públicas aragonesas podría sufrir el síndrome, un porcentaje que en el caso de los docentes de secundaria podría superar el 40% y en el de los empleados de las universidades -personal administrativo, investigadores y profesores- podría rondar el 18%. “El diagnóstico no es fácil.
En España hay muy pocos psicólogos especializados en burnout. Todavía queda mucho por investigar”, apunta Jesús Montero.
 
 

domingo, 7 de junio de 2015

Homenaje a la Seguridad Privada

La delegada del Gobierno, Teresa Palmer; el president en funciones del Govern, José Ramón Bauzá; el jefe superior de Policía, Antonio Emilio Jarabo; y el coronel de la Guardia Civil, Jaime Barceló, presidieron el acto
 
 

La delegada del Gobierno en Balears, Teresa Palmer, presidió ayer junto al president del Govern en funciones, José Ramón Bauzá, el octavo Día de la Seguridad Privada en Balears donde reconoció y homenajeó "la labor que miles de personas realizan a diario para mantener el orden, garantizar la seguridad ciudadana y el libre ejercicio de los derechos, permitiendo de este modo que todos los ciudadanos disfrutemos de una vida sin excesivos sobresaltos y elevados niveles de bienestar".
 
El acto celebrado en el restaurante Es Molí des Comte también contó con la presencia del jefe superior de la Policía Nacional, Antonio Jarabo; el coronel jefe de la Guardia Civil, Jaume Barceló; el jefe de la Policía Local de Palma, Joan Mut; y el presidente de la Comisión Organizadora del Día de Seguridad Privada en Balears, Sergio Cañaveras.
 
En su intervención, la delegada del Gobierno recordó que los aproximadamente 2.000 empleados de 32 empresas- de seguridad privada que trabajan en Balears "protegéis nuestros bienes, nuestras pertenencias, a nosotros mismos, poniendo en juego incluso vuestra integridad física".
 
Palmer aseguró que España concede "una gran importancia a la seguridad privada, como queda de manifiesto en la nueva Ley aprobada el año pasado". Una normativa que "se preocupa por el capital humano del sector, por la formación y la motivación de las personas y es, asimismo, un instrumento contra el intrusismo profesional, una de sus principales lacras". En este sentido, en 2014 la Unidad Provincial de Seguridad Privada de Policía Nacional realizó en Baleares 22 inspecciones de intrusismo en el sector, siete más que el año anterior.
 
Como elemento complementario, el propio sector de la seguridad privada en Balears llevó a cabo el año pasado 785 colaboraciones en delitos como la detección de billetes falsos en centros comerciales, amenazas, lesiones, robos con fuerza, robos con violencia o hurtos, y practicó en torno a 200 detenciones de personas, esencialmente por robos con fuerza y hurtos. "Os habéis convertido en colaboradores indispensables para la prevención del delito y la protección de personas y bienes", añadió la delegada.
 
Reconocimiento;
Durante el acto se reconoció la labor de 70 profesionales de las diferentes empresas de seguridad que prestan servicio en las Islas "que dedicáis vuestro esfuerzo y entrega a que los demás nos sintamos más respaldados". Palmer les dio "mi más sincera enhorabuena".

"Marea Negra" denuncia precariedad en el sector de la seguridad privada

Pide este servicio privado para el Tarajal y mejores medios para el Hospital.
 
La asociación ‘Marea Negra por la Seguridad Privada’ ha cursado una visita a Ceuta, donde ha podido constatar diferentes deficiencias en el sector en la ciudad autónoma y que sufren los profesionales. Concretamente viajó a la ciudad su vicepresidente, José Antonio Carbonell, y uno de los lugares de los que critica sus deficiencias es el Hospital Universitario, “donde las medidas de seguridad brillan por su ausencia”. Además, criticó la “falta de medios que padecen los profesionales” de este sector, “dando con ello lugar a que puedan suceder incidentes sin que se pueda dar la respuesta adecuada”.Otros de los lugares inspeccionados por esta organización son los polígonos del Tarajal, “donde se dan circunstancias para que haya contratada seguridad privada”, tales como el paso fronterizo, la cercanía de la barriada del Príncipe “y un detonante añadido que es el terrorismo yihadista, con un nivel tres”.“En la actualidad este servicio lo dan las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado, que no deberían estar en dicho servicio, sino protegiendo a los ciudadanos ceutíes y no dando cobertura a un polígono gestionado por entes privados los cuales se están lucrando, debiendo contratar profesionales de la seguridad privada”, afirmó, para añadir que “Delegación del Gobierno por ley los tiene que obligar a contratar empresas privadas y en el caso de no llevarlo a cabo, deberían sancionarlos según la Ley de Seguridad Privada”.Esta organización esta inscrita en el Ministerio de Interior y su función es “defender los derechos de todos los profesionales del sector”.